sábado, 17 de diciembre de 2016

Crítica: Mädchen in Uniform (1931)

Título en Español: Muchachas de uniforme
Director: Leontine Sagan
Guión: Friedrich Dammann, basado en una obra de Christa Winsloe
Reparto: Hertha Thiele, Dorothea Wieck, Emilia Unda
Música: Hansom Milde-Meißner
Fotografía: Reimar Kuntze, Franz Weihmayr
Productora: Deutsche Film-Gemeinschaft
 
Handlung
La historia arranca tras la llegada de Manuela a una escuela para muchachas de corte prusiano en Alemania. La disciplina y rigidez son pilares básicos para con la educación de la jóvenes, quienes sufren en sus propias carnes dicho régimen pro-militar. Lo único que hace llevadera la estancia de las muchachas es la presencia de la maestra Elizabeth Von Bernburg, una hermosa y decidida mujer que sabe tratar a las jóvenes con carácter y ternura. Manuela, huérfana de madre y desprovista del amor básico que toda progenitora es capaz de ofrecer, se volcará en el apoyo provisto por Von Bernburg, llegando al punto de confundir amor, por enamoramiento, algo de lo que la profesora será consciente.

Meine Bewertung
Quiero pensar que todo artista que se precie tiene la capacidad de sorprender y mostrar su talento al menos una vez a lo largo de tu trayectoria profesional. Cuantas más veces mejor, claro está, pero no siempre es posible. A veces por el talento del propio artista, otras por circunstancias ajenas a su propio trabajo. La actriz y directora austro-hungara, Leontine Sagan, es un buen ejemplo, ya que tras haber trabajado principalmente como actriz y directora de obras teatrales, estrena en 1931 una película de importancia capital, no solo para el cine alemán, sino para todo su conjunto. Sagan aprovechó la importancia, el peso, y la libertad creativa del cine alemán de aquel momento (años 20, principios de los 30) para rodar una película cuya temática no solo generaría polémica en su momento, sino que seguiría generándola durante décadas posteriores.


Basada en la obra teatral de Christa Winsloe Gestern und heute (Ayer y hoy), Sagan lleva a la gran pantalla una interesante historia de amor que rompe con muchas de las barreras de la época tratando la homosexualidad de forma natural y hermosa. Sorprende que una historia como esta pudiera llegar a estrenarse en los cines hace más de 80 años, pero vuelvo a recordar que estamos hablando de Alemania, probablemente, y hasta la llegada al poder poco después del nacionalsocialismo, uno de los países con mayor libertad creativa de la época. Y es que la cinta trata varios temas, y todos ellos con una soberbia elegancia. La dura disciplina del internado no es más que un simple reflejo de la propia sociedad alemana y como las nuevas generaciones buscaban con ansia una mayor libertad en todo los sentidos. Existe un atisbo de esperanza, y este se encuentra en aquellas personas a medio camino entre el antiguo y el nuevo mundo. Ellos deciden. El personaje de la maestra Elizabeth Von Bernburg realiza la función de enlace. Su capacidad para mantener el orden, que sus compañeras de trabajo la respeten, y que sus alumnas suspiren por ella. Vemos en todo momento un comportamiento que difiere en Von Bernburg con respecto a las otras maestras y que le granjea gran devoción entre sus muchachas. Sin embargo, no es hasta la llegada de la joven Manuela, y como la relación maestra-alumna evoluciona de admiración, cariño hasta el más puro y honesto amor, que Von Bernburg se revela. Y aunque este sea uno de los puntos fuertes de la trama, el desarrollo del mismo peca en ocasiones de irregular. Quiero pensar que este puede deberse tanto a las técnicas narrativas de la época, como a un posible tijerezazo en la versión que tuve la oportunidad de ver, o la practicamente nula experiencia de Sagan a la hora de dirigir un largometraje. Esto ocurre a lo largo de la cinta, y quizás el resultado podría haber sido mucho peor de no ser por la colaboración del experimentado Carl Froelich, uno de los productores de la cinta, y asistente de Sagan durante el rodaje. La directora austro-húngara llevo a cabo una labor más centrada en la dirección de sus actrices, y esto se reflejado en el gran trabajo de todo el reparto, es especial en la pareja protagonista, Hertha Thiele (Manuela) y Dorothea Wieck (Von Bernburg). Ambas se convirtieron en estrellas de la noche a la mañana, disfrutando de numerosas ofertas de trabajo, llegando a coincidir nuevamente en otra cinta de temática similar en 1933, Anna und Elisabeth de Frank Wisbar. Curiosamente, aunque en la película que nos atañe hoy dan vida a personajes con una clara diferencia de edad, ambas tenían la misma fuera de la pantalla.
La película se convirtió casi desde el momento de su estreno en un título de culto, especialmente entre la comunidad gay de la capital alemana, además de recibir premios en otros países como Italia o Japón. Contó además con una serie de remakes en años posteriores como la versión (también alemana) de Géza von Radványi, con Romy Schneider de 1958; una versión mexicana de 1951; o una algo más reciente, esta vez norteamericana, llamada Loving Annabelle. Cabe decir que ninguna de ella puede llegar a compararse a la original.


Das Beste:
La historia, el reparto.

Das Schlimmste:
Lo aparatoso en cuanto el desarrollo de la historia y el final.

Preises:
Festival de Cine de Venecia
Premio a la perfección técnica
National Board of Review
Top Películas Extranjeras

Kinema Junpo Awards de Japón
Mejor Película Extranjera

Nota: 3,75/5 Cervecitas.

Aquí podéis ver la película online:
@cine_aleman

martes, 13 de diciembre de 2016

Crítica: Der Staat gegen Fritz Bauer (2015)

Título en Español: El Caso Fritz Bauer
Director: Lars Kraume
Guión: Lars Kraume, Olivier Guez
Reparto: Burghart Klaußner, Ronald Zehrfeld, Dani Ley, Sebastian Blomberg, Laura Tonke, Robert Atzorn,
Michael Schenk, Matthias Weidenhöfer
Música: Christoph M. Kaiser, Julian Maas
Fotografía: Jens Harant
Productora: Zero One Film / Terz Film / Westdeutscher Rundfunk (WDR)


Handlung
Alemania del Oeste, finales de los años 50, tras la restauración de la democracia y los juicios de Nüremberg a cargos de los Aliados, gran parte de la ciudadanía ha decidido olvidar o ignorar los terribles y recientes acontecimientos de su país. Algunos antiguos altos y medios cargos nazis siguen en las instituciones y actúan con total impunidad, lo que convierte a Fritz Bauer, Fiscal General, en una rara avis debido a su clara y pública condena hacía el nazismo. Pero no será hasta que gracias a un chivatazo desde Argentina en el que aseguran haber dado con el paradero e identidad de Adolf Eichmann, uno de los principales responsables de la Solución Final durante la guerra, Bauer solicite trasladar la investigación de los crímenes del campo de concentración de Auschwitz de la Corte Federal de Justicia al Tribunal Provincial de Frankfurt. Aunque su plan es apresar a Eichmann y juzgarlo en Alemania, Bauer se ve obligado a contactar de manera paralela a su investigación con los servicios secretos israelíes ante el riesgo de que prevengan a ex teniente coronel de la SS. A su vez, la cinta nos presenta el lado menos conocido sobre el relevante Fiscal General, el de su vida privada y su probable homosexualidad.
Meine Bewertung
Resulta curioso como ciertas historias llegan duplicadas a la gran pantalla con tan poca diferencia de tiempo. En esta ocasión nos encontramos con la investigación llevada a cabo por la Oficina del Fiscal General Fritz Bauer sobre los crímenes cometidos en Austwicht. Por un lado tenemos La Conspiración del Silencio - Im Labyrinth des Schweigens (Giulio Ricciarelli, 2014), en la que el director, tras tomarse ciertas licencias creativas con respecto a la historia real, trata de reflejar con gran acierto la realidad sobre el desconocimiento de gran parte de la población alemana (especialmente la más joven) con respecto a los crímenes de los campos de concentración nazis. Este es el tema principal de la película, además de la presión de ciertos poderes para boicotear dicha investigación, siendo la figura de Bauer, relevante aunque secundaria. En la visión de Lars Kraume, Der Staat gegen Fritz Bauer, nos centramos en la figura de Bauer durante dicha investigación con un mayor lujo de detalles sobre la misma, además de presentar algo hasta ahora desconocido por gran parte del pueblo alemán, su posible homosexualidad.

El nombre del antiguo Fiscal General es conocido aún hoy en día entre la población alemana más joven aunque con cierto desconocimiento de la importancia de su trabajo como tal. Es quizás a raíz del descubrimiento de unos informes de la policía danera durante la ocupación alemana por parte del Fritz Bauer Institut a cerca de la relación entre Bauer y chaperos daneses, que se le ha vinculado con la comunidad gay aunque sin pruebas fehacientes o concluyentes. Por lo que no me termina de quedar claro cuanta importancia real supone dicho descubrimiento para con la historia misma. Podríamos preguntarnos si resulta relevante la sexualidad de un personaje a la hora de contar su historia. Sí, siempre que aporte algo a la propia historia. En el caso de Der Staat gegen Fritz Bauer, esto no aporta nada a la misma, ni siquiera al propio carácter de Bauer, de manera que lo que debería haber supuesto poco más que una mera anécdota, se convierte en una pesada losa para el resto de la cinta.
Por lo demás, la película cumple con su intención de recordar la figura de Fritz Bauer y su heroica lucha para investigar y juzgar a los responsable (aún en libertad) de los crímenes de Austwicht. Heroica por atraverse a lo que ningún otro alto cargo del Ministerio de Justicia Alemán se atrevió con anterioridad, y heroica nuevamente por enfrentarse tanto al enermigo de fuera como de dentro.
Tras el punto de vista de unos fiscales imaginarios basados en personajes reales en La Conspiración del Silencio, El Caso de Fritz Bauer nos presenta otro más que interesante punto de vista de la misma investigación y el desarrollo de esta por parte de su principal protagonista.
Cabe destacar el soberbio de trabajo del consagrado actor alemán Burghart Klaußner a la hora de dar vida a Fritz Bauer, por el cual fue aplaudido a nivel internacional.

Das Beste:
El trabajo y la caracterización de Burghart Klaußner.

Das Schlimmste:
La sobreexposición de la vida privada de Bauer y el nulo interés que es esto reporta comparado con el resto de la historia.

Preises:
Premios del Cine Alemán
Mejor Película
Mejor Director
Mejor Actor de Reparto (Ronald Zehrfeld)
Mejor Guión
Mejor Diseño de Producción
Mejor Vestuario

Premios del Cine Bávaro
Mejor Actor

 Festival de Cine Internacional de Locarno
Premio del Público

Premios de la Asociación de la Crítica de Cine Alemán
Mejor Película


Nota: 3/5 Cervecitas.


@cine_aleman

lunes, 30 de mayo de 2016

Premios del Cine Alemán 2016: GANADORES


Un año más llegan los premios más importantes de la industria cinematográfica alemana, los LOLA. La academia otorga anualmente estos premios a los mejores trabajos estrenados en las salas alemanas entre mayo del año anterior y abril del presente. Y si bien la gala anterior encontró una clara y abusiva (con razón) ganadora en la cinta Victoria (Sebastian Schipper, 2015), este ha sido el año de Lars Kraumer con su Der Staat gegen Fritz Bauer, sobre la figura del fiscal general Fritz Bauer y su lucha de capturar y juzgar en Alemania a Adolf Eichmann. La cinta se ha alzado con 6 premios, destacando los de Película y Director. Parece ser que el cine histórico sobre la sociedad alemana post-nacional socialista ha encontrado un nuevo filón. A continuación pasamos a desarrollar de manera breve los seis títulos nominados a Mejor Película y a nombrar tanto nominadas como ganadoras.

4 KÖNIGE (Theresa von Eltz, 2015) 3 nominaciones.
Ópera prima en el mundo del largometraje de su directora que nos cuenta la interesante historia del experimento de un controvertido psiquiatra que decide juntar a tres jóvenes junto a un cuarto con tendencias agresivas para pasar en el centro la Navidad. Aunque en un principio los colegas del psiquiatra le desaconsejan llevar a cabo esta terapia, la misma comienza a dar resultados inesperados.
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DER STAAT GEGEN FRITZ BAUER (Lars Kraumer, 2015) 9 nominaciones
Una película que un primer momento no me llamó la atención salvo por recurrir a una historia que ya habíamos visto en Im Labyrinth des Schweigens (Giulio Ricciarelli, 2014), pero que sin embargo ha contado con un éxito superior a la anterior. A diferencia de la cinta de 2014, esta se centra principalmente en la figura real de Fritz Bauer y las presiones tanto externas como internas para atrapar al evadido Adolf Eichmann, uno de los principales ejecutores de La Solución Final, y trasladarle desde Sudamérica hasta Alemania para juzgarle. Ya veremos si es finalmente escogida por Alemania para representar al país teutón en la próxima ceremonia de los Oscars.
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EIN HOLOGRAMM FÜR DEN KÖNIG (Tom Tykwer, 2016) 3 nominaciones
Tom Tykwer es uno de esos directores que siempre llama la atención con cada proyecto que saca adelante independientemente del resultado final. En esta ocasión el director de Lola rennt se atreve adaptando la novela de Dave Eggers sobre un empresario norteamericano que ha de trasladarse a Arabia Saudí para cerrar un importante trato para su empresa.
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ER IST WIEDER DA (David Wnendt, 2015) 5 nominaciones
Sin duda, la película del año en Alemania. Basada en la novela homónima de Timur Vermes, Ha vuelto plantea en clave de humor el regreso de Adolf Hitler al presente reinterpretando el siglo XXI desde su punto de vista nazi. David Wnendt retoma el tema del nazismo en la actualidad tras su exitosa Kriegerin, en forma de falso documental.
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GRÜßE AUS FUKUSHIMA (Doris Dörrie, 2016) 2 nominaciones
La directora de Kirschblüten vuelve a mostrar su pasión por el país nipón a través de la relación de amistad entre una cooperante alemana y una geisha japonesa entrada en años tras el desastre de Fukushima en 2011.
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HERBERT (Thomas Stuber, 2015) 5 nominaciones
Peter Kurth protagoniza uno de los mejores papeles de su carrera en esta cinta sobre la vida de un ex-luchador de boxeo de la RDA que se ha de ganar la vida trabajando para un cobrador de deudas. 
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MEJOR PELÍCULA
4 KÖNIGE
DER STAAT GEGEN FRITZ BAUER GANADORA
EIN HOLOGRAM FÜR DEN KÖNIG
ER IST WIEDER DA
GRÜSSE AUS FUKUSHIMA
HERBERT

MEJOR DOCUMENTAL
ABOVE AND BELOW GANADOR
DEMOCRACY: IM RAUSCH DER DATEN
WAS HEIßT HIER ENDE?

MEJOR PELÍCULA INFANTIL
HEIDI GANADOR
RICO, OSKAR UND DAS HERZGEBRECHE

MEJOR DIRECTOR
LARS KRAUME (Der Staat gegen Fritz BauerGANADOR
DAVID WNENDT (Er ist wieder da)
MARIA SCHRADER (Vor der Morgenröte)

MEJOR ACTOR
BURGHART KLAUßNER (Der Staat gegen Fritz Bauer)
OLIVER MASUCCI (Er ist wieder da)
PETER KURTH (HerbertGANADOR

MEJOR ACTRIZ
JÖRDIS TRIEBEL (Ein Atem)
ROSALIE THOMASS (Grüße aus Fukushima)
LAURA TONKE (Hedi Schneider steckt festGANADORA

MEJOR ACTOR DE REPARTO
MICHAEL NYQVIST (Colonia)
RONALD ZEHRFELD (Der Staat gegen Fritz BauerGANADOR
FABIAN BUSCH (Er ist wieder da)

MEJOR ACTRIZ DE REPARTO
ANNEKE KIM SARNAU (4 Könige)
LINA WENDEL (Herbert)
LAURA TONKE (MängelexemplarGANADORA
BARBARA SUKOWA (Vor der Morgenröte)

MEJOR GUIÓN
4 KÖNIGE
DER STAAT GEGEN FRITZ BAUER GANADOR
HEDI SCHNEIDER STECKT FEST

MEJOR FOTOGRAFÍA
ABOVE AND BELOW GANADOR
HERBERT
ICH UND KAMINSKI

MEJOR MONTAJE
COLONIA
EIN HOLOGRAM FÜR DEN KÖNIG GANADOR
ICH UND KAMINSKI

MEJOR DISEÑO DE PRODUCCIÓN
COLONIA
DAS TAGEBUCH DER ANNE FRANK
DER STAAT GEGEN FRITZ BAUER GANADOR
ICH UND KAMINSKI

MEJOR VESTUARIO
COLONIA
DER STAAT GEGEN FRITZ BAUER GANADOR
HEIDI

MEJOR MAQUILLAJE
DER STAAT GEGEN FRITZ BAUER 
HERBERT GANADOR
ICH UND KAMINSKI

MEJOR BANDA SONORA
DER STAAT GEGEN FRITZ BAUER 
EVERYTHING WILL BE FINE GANADOR
ICH UND KAMINSKI

MEJOR SONIDO
COLONIA
EIN HOLOGRAMM FÜR DEN KÖNIG GANADOR
ER IST WIEDER DA

@cine_aleman

lunes, 4 de abril de 2016

Berlinale 2016

Un año más, el Festival Internacional de Cine de Berlín dio buena muestra de algunos de los títulos más interesantes o esperados de este 2016. El jurado, presidido por la veterana actriz Meryl Streep, y secundada entre otros por el actor alemán Lars Eidinger, o el británico Clive Owen, tuvo que debatir entre 18 títulos para otorgar el codiciado Oso de Oro. El premio fue a parar a las manos del italiano Gianfranco Rosi por su documental, Fuocoammare. Desde el punto de vista alemán, este no ha sido el año de la filmografía teutona. Participaba en la sección oficial con las coproducciones Alone in Berlin, dirigida por el suizo Vincent Pérez, y protagonizada por Emma Thompson, Brendan Gleeson y Daniel Brühl, sobre una padres, en la Alemania nazi, que tras perder a su único hijo en Francia, empiezan a protestar abiertamente contra Hitler y su gobierno; L´avenir, dirigida por Mia Hansen-Love (ganadora del Oso de Plata a Mejor Director), con Isabelle Huppert, acerca de una profesora de filosofía de un instituto que se replantea un cambio drástico en su vida; Soy Nero, dirigida por Rafi Pitts, sobre un deportado mexicano que trata de regresar a los Estados Unidos; y la única cinta plenamente alemana, 24 Wochen, en la que su directora, Anne Zohra Berrached, vuelve a tratar el tema de la maternidad tras Zwei Mütter, solo que en este caso, tratara sobre el dilema de una madre que tras seis meses de embarazo, descubre que el bebe sufre del síndrome de Down.
Alemania no gana el Oso de Oro desde 2004, año en el que Fatih Akin presentó su obra maestra, hasta el momento, Gegen die Wand, de la que ya hemos hablado este año.

martes, 29 de marzo de 2016

Crítica: Das Experiment (2001)

Título en Español: El Experimento
Director: Oliver Hirschbiegel
Guión: Mario Giordano, Christoph Darnstädt, Don Bohlinger (Novela: Mario Giordano)
Reparto: Moritz Bleibtreu, Maren Eggert, Christian Berkel, 
Justus von Dohnányi, Andrea Sawatzki, Edgar Selge
Música: Alexander van Bubenheim
Fotografía: Rainer Klausmann
Productora: Senator Film/ Typhon Film/ Fanes Film


Handlung
Un grupo de científicos de una universidad alemana llevan a cabo un estudio psicológico acerca de la conducta desarrollada, en un ambiente extremo, por los hombres, dependientes de su rol en un determinado grupo. Para ello seleccionan a veinte candidatos que a su vez se dividirán en dos grupos. Por un lado, doce que harán las veces de presos y que se verán recluidos en un recinto cerrado, semejante a una prisión, con auténticas celdas; por el otro, ocho que ejercerán de guardias que han de mantener constantemente el orden de la manera que consideren más oportuna, aunque sin hacer uso de la violencia. El buen ambiente inicial no tardará en tornar radicalmente de manera opuesta cuando tanto guardias como presos empiecen a asimilar sus roles dentro de la cárcel debido a la presión que ejercen tanto la situación, como los propios miembros del grupo, llegando a poner en peligro, no solo la vida de los presos, sino la de los propios investigadores, que no se atreven a poner fin al experimento.

Meine Bewerung
La película está basada en la novela de Mario Giordano, The Black Box, que a su vez está inspirada en el experimento de la cárcel de Stanford, California, por Philip Zimbardo. Al igual que el propio argumento de la cinta, el equipo de Zimbardo seleccionó a una serie de candidatos para llevar a cabo un experimento con la intención de entender los conflictos y abusos que se producían en las cárceles de las Fuerzas Armada de los Estados Unidos. Bajo la premisa de la teoría de la disonancia cognitiva, se creía que una persona podía llegar a cambiar su forma de pensar y actuar si se sentía convencido que la ley o un ente autorizado superior legitimaba sus acciones, todo esto unido a un ambiente cerrado que ejercía una presión añadida sobre el sujeto. Zimbardo buscaba una conclusión que añadiese valor al también conocido experimento de Milgram, en el que un grupo de personas eran instadas a administrar schocks eléctricos a otros individuos amparados en la autoridad y responsabilidad del experimentador. Tanto en el experimento en Stanford como en la película, el desarrollo de los acontecimientos es similar. Tras un primer día sin resultados aparentes, el comportamiento de los presos obliga a los guardias (quienes tienen la autoridad y el permiso de actuar como les parezca mejor, aunque sin hacer uso de la violencia) a llevar a cabo acciones disuasorias, entre las que se incluye el uso de extintores, la separación de presos para minar la fuerza del grupo, la humillación, castigos con respecto a la comida o el uso del baño, ejercicios como castigo físico... los guardas ven acrecentada su moral y fuerza, lo que les anima a ir a más, mientras que los presos aceptan sus roles. Ante las críticas de una estudiante de posgrado que no tenía relación directa con el experimento, por las condiciones de vida de los presos, Zimbardo decidió ponerle fin tras solo seis días. A diferencia de esto, los guionistas de la película deciden seguir adelante, siendo casualmente a partir de este punto cuando la cinta pierde gran parte de su fuerza.

Y es que si la cinta destaca por algo, además de la perfecta recreación del ambiente claustrofóbico del experimento, el desarrollo psicológico de los personajes (tanto guardas como presos) y la propia experiencia, es por su interesante planteamiento. Todo esto se debe principalmente a la minuciosa dirección de un primerizo como Oliver Hirschbiegel, quien es capaz de crear una atmósfera asfixiante haciendo uso de una genial recreación física de la prisión, la música por parte de Alexander Bubenheim (que recuerda a la empleada por otros directores a finales de los 90s y principios del 2000 como Tom Tykwer), y la fotografía de Rainer Klausmann. Sin embargo, existen dos claros fallos que perjudican al conjunto de la cinta, y ambos están en el guión. Por un lado, como apuntaba anteriormente, a diferencia del caso de Zimbardo, en la película siguen adelante con el experimento, desembocando en el motín de los propios guardias cuando toda la situación se descontrola y que acapara el tramo final de la cinta. He leído críticas al desarrollo de este, y la poca credibilidad del mismo, pero también he leído trabajos sobre el mismo estudio de Zimbardo, y no me parece descabellado suponer que podría haberse producido una situación similar. Lo que se nota es el exceso de imaginación a la hora de plantear los fallos de seguridad de los propios investigadores. Como los guardas se hacen con el control, no solo de la prisión, sino del propio experimento... Por otro lado, el protagonista de la cinta, Tarek, consigue huir de una especie de caja negra en la que le han encerrado porque milagrosamente encuentra en su interior un destornillador... ya está. Nada más. Es en ese preciso momento en que la credibilidad y calidad de la cinta cae cuesta abajo como los vagones de una montaña rusa en la bajada. El otro punto desfavorable en la cinta es la historia de amor entre Tarek y una mujer que conoce en un accidente de coche y que ha perdido a su padre recientemente. El desarrollo de la historia, mostrado al espectador a través del uso de flash-backs (por lo general en los momentos de sufrimiento o duda del protagonista como válvula de escape), resulta forzado e incomprensible en ciertos aspectos. El uso del personaje de la mujer, salvo como nexo de unión con el exterior, es tanto torpe como innecesario. Por poner dos ejemplos, Dora, que es el nombre del personaje, va en busca de Tarek tras una primera noche íntima, y al no encontrarle ni saber nada de su paradero, decide instalarse en su piso; el otro, y este ya es mi favorito, tiene que ver con la visita de la propia Dora a la prisión cuando, sin apenas conocer a Tarek (aunque el feeling entre ambos es más que obvio), le pide que deje aquello y se vaya a vivir a Canadá con ella... ya está. Nada más (otra vez). Comprendo la intención de los guionistas con este personaje, pero el desarrollo de este resulta desastroso para la película.
Resulta grato ver como ciertos directores son capaces de darlo todo en su debut, en un claro ejemplo de talento y maestría impropia en los novatos. Es el caso de Hirschbiegel, quien poco después nos regalaría, con su segunda película, la genial Der Untergang, pero que desde entonces parece haber perdido el rumbo. Aunque el protagonista de la cinta es el conocido actor (tanto a nivel nacional como internacional) Moritz Bleibtreu, quien da vida a un ex periodista que ahora trabaja como taxista y ve en el anuncio del experimento una oportunidad para volver a ejercer su profesión original, este no hace más que cumplir con su rol principal, dejando que gran parte del peso de la cinta lo lleven otros secundarios que ganan mucho más gracias al desarrollo de sus personajes, como son los guardas Justus von Dohnányi, Timo Dierkes, Nicki von Tempelhoff, Antonie Monot Jr., o el preso Oliver Stokowski. A pesar de la admiración que le tengo a Christian Berkel, su personaje, a pesar de resultar interesante, no le permite un mejor desarrollo del mismo, de la misma manera que Maren Egger, que da vida a la temible Dora.
La película fue todo un éxito en Alemania, recibiendo alabanzas tanto por la crítica como por el público, y fueron ciertamente merecidas. El cine no ha tratado en demasía el mundo de la psicología de manera seria, salvo en tramas con trasfondo paranormal o como excusa de historias poco creíbles. Resulta loable encontrar historias que buscan mostrar una explicación científica a ciertos comportamiento del ser humano (aunque desvaría al final), de la misma manera que la otra recomendable Die Welle - La Ola (Dennis Gansel, 2009).

Das Beste:
El argumento; la dirección de Hirschbiegel; la recreación de la asfixiante atmósfera de la prisión, Justus von Dohnányi.

Das Schlimmste:
El tramo final y el personaje femenino.

Preises:

Premios del Cine Alemán
Mejor Actor (Moritz Bleibtreu)
Mejor Actor de Reparto (Justus von Dohnányi)
Mejor Película para el Público

Premios del Cine Bávaro
Mejor Director
Mejor Guión
Mejor Fotografía

Nota: 3,5/5 Cervecitas


@cine_aleman

martes, 23 de febrero de 2016

Crítica: Jeder für sich und Gott gegen alle (1974)

Título en Español: El enigma de Gaspar Hauser
Director: Werner Herzog
Guión: Werner Herzog
Reparto: Bruno S., Walter Ladengast, Brigitte Mira,
Willy Semmelrogge
Música: Clásica
Fotografía: Jörg Schmidt-Reitwein y Klaus Wyborny
Productora: Werner Herzog Filmproduktion/ ZDF

Handlung
Basada en hechos reales, cuenta la historia de un joven llamado Kaspar Hauser, quién a principios del siglo XIX, tras haber vivido años encerrado y atado en un sótano, es abandonado en la ciudad de Nüremberg. En un principio será recibido con interés por parte de la población, quien tratará de aportar una educación a una persona que apenas sabe hablar, mucho menos leer o escribir. Para sufragar los gastos, se le expondrá en un espectáculo de fenómenos junto a otros pobres desgraciados aquejados de diferentes deficiencias físicas o psíquicas. Al menos hasta que unos pocos, inducidos por intereses científicos y humanos decidan rescatarle de semejante existencia para darle una vida más digna, además de aportarle una verdadera educación. Kaspar aprenderá a expresarse, a razonar, y hasta tocar el piano, lo que no evitará que la mayoría de las personas le sigan viendo más como un objeto digno de estudio que un ser humano.

Meine Bewertung
Como apuntaba al principio, la película se basa en el caso real de Kaspar Hauser, el cual sigue presentando muchas incógnitas a día de hoy. Personaje celebre en la historia de Alemania, especialmente en Baviera, no se sabe a ciencia exacta quien fue realmente Kaspar, ni las razones de su encierro durante más de 16 años. Werner Herzog aprovecha la conocida historia para realizar una dura crítica contra la sociedad de la época, a la falta de comprensión, y a la imposición de unos ideales. Catalogado como niño salvaje, parece ser que no se tuvieron suficientemente en cuenta las causas de dicho estado. El joven se crió practicamente solo, encerrado en un sótano, atado. Su aspecto y educación eran más propios de la idea preconcebida de un salvaje que la de una persona de la época. Su nula educación suscita las burlas e indignación por parte de los presentes, sin embargo, cuando el personaje empieza a entender y a razonar, cualquier opinión contraria a la establecida es considerada un defecto de su propia condición de salvaje o inadaptado. El caso de Kaspar Hauser se asemejaría al de un alienígena que llega a la Tierra, aprende el idioma, las costumbres, y que por esos mismos conocimientos y un razonamiento lógico empieza a plantear dudas, como por ejemplo, la existencia de Dios. No tendríamos en cuenta su opinión como válida (independientemente que estemos de acuerdo o no) de manera razonada, sino que la considerariamos meramente absurda por ser un alienígena. Kaspar es un alien. Un alien rodeado de seres víctimas del costumbrismo y falta de auto-crítica.


Esta cinta tiene otra de esas historias que merece aparecer en todos los libros de curiosidades sobre el mundo del cine, y es la de su protagonista, Bruno Schleinstein, o Bruno S. Criado en diferentes orfanatos y asilos mentales tras ser abandonado por su madre, una prostituta, Bruno demostró capacidades impropias de alguien de sus características. Era capaz de tocar varios instrumentos musicales, además de ser un actor autodidacta. En cierto modo, presentaba muchas semejanzas con el propio Hauser, razón por la cual Herzog le escogió para protagonizar su película tras ver el documental Bruno der Schwarze - Es blies ein Jäger wohl in sein Horn, del año 1970 sobre el propio Bruno. Si tenemos en cuenta la diferencia de edad (Hauser tenía 16 años cuando fue abandonado en la ciudad, mientras que Bruno S. contaba con más de 40 cuando comenzaron a rodar la película), quizás la elección de este actor no profesional no fuese la indicada. Sin embargo, la propia personalidad de Bruno dota de gran realismo al personaje de Hauser, regalándonos una de las actuaciones más cautivadoras de la historia del cine alemán. En el reparto, merece la pena destacar la aparición de nuestra querida Brigitte Mira, a quien recordamos por la cinta Todos nos llamamos Alí (Rainer Werner Fassbinder, 1974) del mismo año.
La película contó con el aplauso de la crítica especializada, especialmente en el prestigioso Festival de Cine de Cannes, aunque a día de hoy no sea de las más recordadas de la filmografía de Herzog.

Das Beste:
El tratamiento de la historia; la crítica a la sociedad por parte de Herzog; y la banda sonora compuesta por temas de música clásica.

Das Schlimmste:
El ritmo.

Preises:
Festival de Cannes
Gran Premio del Jurado
Premio FIPRESCI
Premio del Jurado Ecuménico

Premios del Cine Alemán
Mejor Diseño de Producción
Mejor Edición

Nota: 3,5/5 Cervecitas.

Podéis ver la película online aquí:


@cine_aleman

miércoles, 10 de febrero de 2016

Crítica: Der Himmel über Berlin (1987)

-Cuando el niño era niño...

Título en Español: El cielo sobre Berlín
Director: Wim Wenders
Guión: Wim Wenders, Peter Handke Richard Reitinger
Reparto: Bruno Ganz, Otto Sander, Peter Falk,
Solveig Dommartin, Curt Bois
Música: Jürgen Knieper
Fotografía: Henri Alekan
Productora: Road Movies Filmproduktion/ Argos Film


Handlung
Damiel y Cassiel son dos de los muchos ángeles que sobrevuelan los cielos de la Berlín dividida por el muro observando (en color sepia) y escuchando a los humanos. No existe interacción directa entre ellos, y únicamente los niños y las personas de buen corazón son capaces de verles o sentir su presencia. Aunque llevan realizando la misma tarea desde siempre, no llegan a entender muchos de los sentimientos de los hombres. Damiel, quien se enamora de una trapecista, y que arde en deseos de comprender mejor a los humanos, decide dejar las alas para así poder llevar la vida de un hombre normal y corriente.

Meine Bewertung
Cuando hablamos de los directores alemanes más reconocidos a nivel internacional, resulta inevitable mencionar a Wim Wenders. La crítica siente gran admiración por este director que, al igual que muchos otros de su generación, transformaron el cine alemán desde finales de los años 60. Aunque partiendo de unas bases diferenciadas, la heterogeneidad de los miembros de esta ola resulta más que evidente. En el caso de Wenders, nos encontramos con un autor claramente influenciado por el cine internacional, especialmente el norteamericano, aunque tampoco oculta su fascinación por el cine de Yazujiro Ozu, por poner un ejemplo. Wenders se hizo un nombre tras los éxitos de cintas como Alicia en las ciudades, El amigo americano, y especialmente, París, Texas. Todas ellas le valieron un gran reconocimientos artístico, pero sería en 1987 cuando estrenaría posiblemente su obra maestra, y que a día de hoy es considerada como cinta de culto, El cielo sobre Berlín (o Las alas del deseo).


El director busca mostrar dos realidades. La sepia existencia eterna de los ángeles, y la de los humanos en color. Los primeros son testigos del día a día de los segundos. Son confesores invisibles de sus más secretas y privadas cuestiones. Muchas de ellas son de carácter cotidiano, pero las hay que traspasan la línea y van más allá. Preguntas referidas al sentido de la vida, a la soledad, al futuro, al amor... los ángeles poco pueden hacer para ayudar a los humanos salvo trasmitirles cierto consuelo etéreo. Damiel, interpretado magistralmente por Bruno Ganz y cuya imagen con las alas subido a lo alto de la Iglesia Memorial Kaiser Wilhelm de Berlín es todo un icono, ansía entender más sobre los sentimientos de los humanos, algo que su condición de ángel le impide. Su misión es la de observar y escuchar, nada más, pero su deseo de sentir como los humanos, unido a la fascinación por el personaje de la trapecista, interpretada por Solveig Dommartin, es tan grande, que finalmente logra la trasformación. Poco a poco irá descubriendo la realidad de los sentimientos o las experiencias, ya sea tomar un café, fumar un cigarrillo, estrechar una mano o recibir un beso de la persona que ama. Dos formas de pensamiento, al fin aunadas, que tendrán como único propósito, la búsqueda de la felicidad mortal.
Partiendo de una idea más que fascinante, el problema de la película radica en la excesiva recreación por parte de Wenders en cuanto tanto a la cantidad de pensamientos que escuchan los ángeles, como a la inexistente ritmo de la cinta. La línea argumental de la cinta se ve entroncada por un excesivo número de escenas intrascendentes que queriendo plasmar un sin fin de cuestiones de tinto filosófico por parte de los guionistas no hacen más que entorpecer el ritmo. A su vez, si bien las reflexiones de los personajes humanos, ya sean la trapecista, el narrador, o el propio Peter Falk, resultan interesantes, el desarrollo de las mismas resulta más que inverosímil ya que dificilmente una persona lleva a cabo dichas reflexiones con semejante lenguaje. Encuentro más apropiado un texto cuyas elucubraciones vengan acompañadas de un mayor número de ejemplos personales, en vez de las que aparecen en pantalla. La fascinante fotografía por parte del consagrado Henri Alekan, las tomas en picado recorriendo los tejados de Berlín, el excelente uso de la música, el argumento de la cinta, y el carisma del genial Bruno Ganz, logran tapar en gran medida el, en ocasiones, lastre del guión.
Seis años después, Wenders, quien concluía la película con un continuara... estrenó la segunda parte, Tan lejos, tan cerca, en la que contaba con parte del reparto original, aunque en esta ocasión es Otto Sander, Cassiel en la cinta, el protagonista.


Das Beste:
La fotografía, Bruno Ganz.

Das Schlimmste:
El guión y el ritmo de la cinta.

Preises:
Festival de Cannes
Mejor Director

Premios del Cine Alemán
Mejor Película
Mejor Fotografía

Premios del Cine Europeo
Mejor Director
Mejor Actor Secundario

Premios del Cine Bávaro
Mejor Director



Nota: 3,5/5 Cervecitas.

@cine_aleman